Hecho a mano, hecho con el corazón
¿Qué significa que algo esté hecho a mano?
La primera idea es que algo hecho a mano, está hecho con el corazón e implica que está elaborado artesanalmente. Por lo tanto es una pieza única, creada exclusivamente para quien la usará. En un mundo que va tan rápido y acelerado, donde el tiempo es un recurso escaso y los resultados tienen que ser inmediatos; tener algo hecho a mano, que toma su tiempo para ser elaborado, es prácticamente un lujo e incluso un acto de amor.
No a cualquiera le dedicamos el tiempo para regalarle algo hecho con nuestras propias manos. Aprender una técnica, pensar qué le podría gustar a esa persona especial, y sobre todo encontrar el tiempo para realizarlo no es algo que suceda de la noche a la mañana. Va tomando forma poco a poco, puntada a puntada. Tal vez alguna cosa buena que nos dejó la pandemia fue que muchas personas, buscando alternativas para relajarse y promover su bienestar, retomaron o aprendieron diversas técnicas de manualidades como bordado, tejido, costura, pintura, entre otras. Fue un espacio seguro para atravesar el momento.
Cuando hablamos que algo toma su tiempo para ser desarrollado, y además es una pieza única, adquiere mayor valor. Sobre todo un valor sentimental que no puede ser medido con ninguna escala. Imaginemos lo que puede significar para alguien la primera prenda hecha para esa persona especial, para ese nuevo miembro de la familia por llegar, un regalo para decorar la casa de alguien, algún elemento para ese momento especial. El amor y dedicación puesto en el proceso es prácticamente invaluable… sino pregúntale a esa persona que te regaló algo hecho con sus manos.
“Cuando pienso en algo hecho a mano, inmediatamente me evoca la época cuando mi abuela solía tejer o coser alguna prenda para mí. Recuerdo que traía su cuaderno y su centímetro y empezaba a tomarme las medidas: largo, espalda, contorno, sisa… eran momentos divertidos y de profunda conexión con ella. Pero no solo era ese mágico ritual de la toma de medidas, sino también la elección de modelo, los colores, los materiales, pensar para qué lo usaría. Luego tocaba la prueba y así poco a poco los materiales iban tomando la forma deseada… una chompa, un chalequito, un vestido, un pantalón, tantas cosas…” (Silvanna)
“Cuando le dedico tiempo a las personas que me importan preparando alguna pieza o comida especial, significa que le regalo mi amor, traducido en algo que sale de mis manos y que le puse todo mi interés para que sea bello y de su agrado. Pienso cómo le servirá, cómo será usado y sobre todo espero que lo disfrute.” (Doris)
Si nos enfocamos en el proceso de creación, este resulta ser muy satisfactorio. A pesar que a veces tenemos que tejer y destejer o que tenemos que cortar el hilo porque nuestra obra no está saliendo como queremos, y la situación se convierte casi en una prueba de resistencia y resiliencia. De pronto y de una forma misteriosa sucede que aprendimos a dominar un nuevo punto o técnica, que al inicio era esquiva. Entonces nuestras manos empiezan a crear y es una sensación mágica.
¿A quién le regalarías algo hecho por ti? ¿Qué sería?
D&S

Comentarios
Publicar un comentario